Primero pensemos: ¿por qué emprender si ya estoy trabajando?
Bueno, hay que tener en cuenta que mientras trabajemos para otra persona ningún trabajo es seguro. También es cierto que en muchas empresas, lamentablemente, hasta el día de hoy las mujeres percibimos sueldos menores a los hombres incluso teniendo el mismo nivel jerárquico. Hay otras que no se sienten satisfechas con su puesto, no les gusta su trabajo o el clima laboral de la empresa donde están. Varias ya no quieren trabajar para otras personas y anhelan ser su propia jefa. Y en muchos casos, todo lo anterior no es tema, pero quizá el sueldo que ganan no alcanza para cubrir todos los gastos y hay que buscar como generar dinero extra. En realidad hay diversas situaciones y motivos por los que una puede decir ¡yo quiero emprender!, pero pasar del yo quiero al hacerlo nos puede demorar mucho tiempo.
Algo que muchas personas piensan es que es imposible hacer ambas cosas en paralelo porque para emprender necesitas invertir mucho dinero y el sueldo no alcanza para lanzarte de lleno. También existe la duda de que se necesita dedicar mucho tiempo y si estás trabajando con un horario fijo es más difícil disponer de tiempo libre para dedicarlo al emprendimiento. Otro temor habitual es perder “la seguridad económica”. Siendo así, la pregunta lógica que surge a continuación es «y entonces ¿cómo hago?«
Queremos que sepas que esto SI es posible. Que hay muchísimas emprendedoras que hacen ambas cosas. Nadie dice que es fácil, pero si se puede. Todo depende de que te decidas y seas muy organizada y persistente.
En definitiva, primero que nada tienes que estar segura de que realmente quieres emprender, porque esto va a requerir esfuerzo y disciplina. Segundo, tienes que tener la idea clara ¿qué necesidad vas a satisfacer? Tercero, debes desarrollarla adecuadamente con un plan de trabajo claro. Asimismo, define de antemano si lo vas a poder hacer sola o si vas a necesitar ayuda.
Comencemos dejando claro que no todo emprendimiento requiere hacer una gran inversión, hay algunos que con un desembolso mínimo pueden arrancar dependiendo el rubro. Lo que si es cierto es que si no estás en un trabajo fijo (es decir con un ingreso fijo mensual) si vas a necesitar tener un respaldo económico para poder asumir tus gastos diarios y mensuales, como por ejemplo: la hipoteca, el alquiler, la comida, el colegio de los niños, etc.
Es por ello que si no cuentas con ese respaldo, que en promedio debería alcanzarte para vivir un año, que es lo que generalmente demoran los negocios en comenzar a generar ganancias, te recomendamos que en la medida de lo posible tengas un empleo fijo de medio tiempo o a tiempo completo.
Entonces… ¿Como podemos hacer ambas cosas?
- Es muy importante que no descuides tu trabajo, recuerda que por el momento vives de eso, así que mientras estés en horario de oficina, dedícate al 100% a tus obligaciones. Lo último que queremos es que tengas problemas con tu jefatura.
- Comprométete con tu negocio. El mismo empeño que le pones a tu trabajo de oficina debe ser replicado en tu emprendimiento, incluso más si es posible ya que en este caso no va a haber nadie verificando que se cumplan los objetivos… Tú misma eres, así que la responsabilidad y el compromiso son clave.
- Organízate. Acomoda tus horarios fuera de la oficina para poder desarrollar tu emprendimiento. Vas a tener que optimizar el tiempo que tienes libre, así que muy probablemente en un principio tengas que destinarle tanto días de semana como los fines de semana.
- Como probablemente vas a tener la cabeza partida en dos o en más, por tu trabajo, tu negocio y tus propias actividades, te recomendamos utilizar una agenda, un planner y/o un moodboard.
- Si tienes una socia o un socio, organicen reuniones de trabajo eficaces. Recuerda que en tu caso el tiempo es oro, así que antes de cada reunión prepara claramente los puntos a tratar para que no divaguen y logren enfocarse.
- Ten en cuenta que esto va a tomar tiempo así que debes ser persistente en lograr tus objetivos. No esperes que al mes o dos o tres ya puedas vivir de ello y estés pensando en renunciar a tu trabajo.
- Finalmente, si no sabes algo o te sientes sobrepasada pide ayuda. Actualmente existen muchas formas para poder capacitarte. Busca una asesoría a la medida de tus posibilidades para despegar tu negocio.
Así que ya sabes, si estás trabajando y hace tiempo quieres emprender, te animamos a que dejes las excusas de lado y planifiques ese negocio soñado.
Cuéntanos ¿tienes un trabajo fijo y al mismo tiempo emprendes?
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