Cada vez que nos sentamos frente a una emprendedora nuestra primera solicitud es revisar su plan de negocios… y con sorpresa comprobamos que el 90% no lo tiene.
Armar uno (idealmente antes de lanzarse al mundo del emprendimiento) no es algo antojadizo, todo lo contrario. El plan de negocios, independiente del rubro o tipo de negocio que queramos poner, debe ser trabajado muy seriamente y de manera organizada, considerando todos los aspectos que puedan influir en tu emprendimiento y haciendo un análisis de los riesgos, viabilidad y resultados esperados.
¿Por qué es importante armar un Plan de Negocios?
Porque la planificación es la clave para que tu negocio llegue a ser rentable; de lo contrario solo será un hobby con el que no ganes y que incluso puede hacerte perder mucha plata. Tu plan de negocios es tu hoja de ruta y debe describir al detalle las actividades que vas a realizar, los objetivos que quieres lograr, las estrategias a implementar y las proyecciones de ingresos, costos y gastos. Asimismo, es importante que consideres todas las áreas, inclusive aquellas en las que no te manejas (y así también presupuestes el costo de ayuda externa en un futuro). Ojo que esto no significa que deba tener una estructura complicada, al contrario, lo que importa es que sea detallado y fácilmente comprensible.
Un Plan de Negocios bien elaborado nos permite ir afinando nuestra idea inicial y ver con objetividad los caminos que podemos tomar para lograr el volumen de ventas ideal para mantenernos en el mercado generando ganancias, reduciendo en gran medida los errores en el tiempo.
¿Qué partes debe tener tu Plan de Negocios?
Descripción del negocio:
¿Qué queremos hacer? ¿en que consiste? En esta sección especifica bien tu idea y cómo quieres llevarla a cabo. Por ejemplo, te encanta hacer dulces y quieres vivir de esto…. Entonces describe acá todos los dulces que haces, si los quieres vender directamente por redes sociales, o a través de una pastelería, o ambas, o quieres abrir tu propia tienda, etc. Expláyate aquí poniendo en papel todo lo que proyectas porque es en las siguientes partes dónde vas a empezar a ajustar y darle forma final a tu idea según los datos que vayas recolectando.
Análisis del Mercado:
Investiga bien las características del mercado en el que vas a colocar tu negocio: ¿quiénes son tus clientes potenciales y cuáles son sus características? no solo considerando variables demográficas, sino -importantísimo- que estilo de vida y comportamiento de compra tienen. ¿Qué precios se manejan? ¿qué plazos de entrega? Recopila toda la información posible acerca de tu mercado, incluso esa que parezca “poco relevante”, porque mientras mas lo conozcas podrás diseñar mejores estrategias para llegar a él con facilidad, vendiendo más y mejor.
Análisis de la Competencia:
¿Quiénes son tus competidores directos? ¿y los indirectos? Muchas veces no consideran a los indirectos, siendo que éstos pueden llevarse una tajada del pastel general. ¿Qué hacen? ¿cómo venden? ¿cómo se promocionan? Analiza sus puntos fuertes y débiles vs los tuyos para que puedas pulir tu estrategia.
Estrategia de Marketing & Ventas
Ya recopilaste toda la info necesaria para tener claro cómo es que vas a abordar a tus futuros clientes, por lo que ya puedes desarrollar un plan mas aterrizado que contemple precios, la cantidad que necesitas vender (el famoso PxQ), los canales que mejor funcionan para hacerlo y que actividades promocionales que vas a realizar (que ojo, hay algunas orientadas a imagen de marca y otras orientadas a generar ventas).
Operaciones
¿Lo vas a hacer todo sola? ¿necesitas trabajar en conjunto con alguien mas para lograr tus objetivos? En esta parte detalla cuántas personas necesitarías (que no significa que las contrates directamente, pueden ser servicios terciarizados, pero igual van a trabajar contigo y van a ser parte fundamental del éxito o fracaso de tu emprendimiento) para que toda tu operación funcione. Asigna las funciones de cada persona clave, que esperas de su trabajo y que responsabilidades va a tener.
Plan Financiero
Para muchos, esta es la sección “pincha globos” …. pero no lo es para nada. Si bien cuando monetices tu plan este puede estar por encima de tu presupuesto inicial, tener claro cuánto te cuesta poner en marcha tu emprendimiento de manera organizada te permite analizar también las formas de financiamiento que mejor se adapten a tus posibilidades, o te servirá para reformular los objetivos y llegar igual a la meta pero a través de un camino alterno. Porque de eso se trata planificar: conocer tus opciones y reaccionar a tiempo cuando las cosas no sean como habíamos proyectado. En esta sección se muy honesta con los montos que asignes, la información la tienes porque ya analizaste mercado y competencia.
En próximos posts vamos a profundizar en cada parte del plan para que te sirva de guía, por ahora busca lápiz y papel y empieza a darle forma real a tu sueño para vivir de él en un futuro muy próximo ¡vamos por mas!